lunes, 5 de mayo de 2008

Nuestros grandes relatos que nos preservan de otros relatos, las vivencias, la construcción subjetiva del peronismo. En recuerdo y gratitud de Evita,

Querido Amigo
Pedro, yo tengo 48 años, lo que conocí del peronismo en mi experiencia de vida fue, primero López Rega e Isabel y luego Menem.
En esa formación eurocéntrica, fijáte quiénes han sido mis profesores: Gustavo Lambruschini, Alcira Argumedo, Horacio González, Nicolás Casullo, Alejandro Horowicz, todos peronistas.
En mi postgrado siguieron siendo peronistas y ahora en el doctorado te paso algunos nombres Waldo Ansaldi y Eduardo Rinesi.
Los autores europeos que conocí, todos los conocí por profesores que se definen como peronistas de izquierda. Perón nunca fue de izquierda. Ergo el peronismo no puede serlo.
Creo que la ausencia, el exilio de Perón, fomentó un imaginario que tomó las figuras de Eva y el Che para levantar una bandera populista, revolucionaria, de izquierda.
El problema del PJ es que les dá la bienvenida a muchos que están en las antípodas. Otro docente que tuve Anacleto Llosa me decía "somos todos peronistas pero no tenemos nada que ver entre nosotros..."
Querida Amiga
Ya que vamos a los recuerdos, te cuento los míos. Lo primero que conocí del peronismo fué a partir de mi madre, que si bien era de clase media alta, era una mujer de avanzada, extraña feminista, que tenía allá por el año 39 una coupé último modelo, ford, de su propiedad y que la manejaba ella. Creo que por entonces, debía ser la primera y única mujer que manejaba en La Plata. Bailaba de maravillas el tango, y en las fiestas, "se paraban pa mirarla", esto quiere decir que generalmente hacían rueda cuando bailaba con alguien, y se destacaban como bailarines muy por arriba del la media.-
Esta mujer, cuando advino el peronismo, creó una Unidad Básica en el barrio donde teníamos nuestra casa, no obstante que mi padre tenía militancia radical, y conocía como amigo, a grandes figurones del radicalismo de La Plata. Lo primero que conocí fueron esas reuniones de mujeres, de las cuales me llegaban un relato realmente hermoso por la solidaridad, la buena onda, y como disfrutaban la tarea en común.- Toda mi familia (materna y paterna) era profundamente antiperonistra, y lo fué siendo cada vez más a medida que Perón y Evita profundizaban medidas en favor del pueblo.
Evita esta presente en las subjetividades de estas, muchas mujeres, de diversas clases sociales que se reunían en la Unidad básica, para juntar ropa, alimentos, organizar rifas, hacer kermesses, y muchas otras acciones que tenían mucho que ver con la solidaridad y la construcción de una red social.
Sin lugar a dudas que ellas estaban mucho más cerca de Eva que de Perón, y así iban construyendo su relato que iban transmitiendo a nuestras familias de forma tal que contaban una historia muy diferente del mundo que la que escuchábamos los chicos "del otro lado" (que estaban cargadas de odios, resentimientos, malicias, descalificaciones, y bastante más). El relato de las mujeres de Evita era esperanzador, traía mucho de amor, mucho de referencia y respeto a las personas ancianas, a los niños, a los trabajadores, y a las propias mujeres, trabajaran donde trabajaran, y reconsiderando a las "amas de casa que se quedaban con sus hijos" a los cuales se reconocía como trabajadoras de la creación y el cuidado de la vida, y de la continuidad de las generaciones. Sin duda que también las mujeres hablaban y publicaban algunos textos sobre las conquistas sociales de la mujer, y bregaban por el voto femenino.-
Ni que decirte de la maravilla encantada que relataban cuando se fué construyendo "La República de los Niños"..La felicidad era difícil de transmitir; la alegría que trasuntaban era hermosa y nos generaba un horizonte bellísimo.-
Así yo comencé a conocer el peronismo, por las vivencias y el relato materno.
Estudié en el Colegio San José, de 1mero inferior hasta 5to año. Fuí abanderado y medalla de oro.- Parecía callado y no era el kilombero del grado, era más vale el "sabiondo" pero respetado por los demás muchos de ellos grandes vagos.
Comencé, allá por el 53 a ver como en este colegio llegaban hombres extraños, que traían grandes cajones que contenían armas y que se guardaban bajo de los altares de la Capilla. También observé y escuché como poco a poco los curas, profesores y todo el personal del Colegio, comenzaba ha construir un relato denigrante, brutal, lleno de maldad y oprobio contra Perón y contra Evita, de quien mi madre me había creado una imagen de amor, lucha, trabajo y creación, junto a todas las mujeres y los trabajadores, así como de los niños y los ancianos.
Unos años antes, leía en las paredes, pintadas con bleque, negro, "VIVA EL CÁNCER", en verdad no sabía que quería decir ese texto.- Me era doblemente indescifrable: No sabía el significado del "cáncer", y menos aún por qué se lo vivaba. No obstante, por las letras, el negro del bleque, y las manchas que dejaban en la pared, no dejaban de hacerme correr una cierta ansiedad muy fea, que con el tiempo pude designar como "percepción de lo siniestro".
Bueno, luego vienen los bombardeos a plaza de mayor, que mis padres vivieron con mucha angustia, y con gran dolor, ambos. Mi padre nunca festejó la caída de Perón, ni la manera como se produjo. Es más, creo que la reprobó expresamente, no obstante su pertenencia cada vez menor al radicalismo platense.
Luego vienen dos hechos que me marcaron a fuego.-
El primero fué que mi padre, quien tenía una empresa de pintura, de muchísima calidad para esa época, tanto que él y su gente, pintaron las iglesias más importantes de la ciudad de La Plata (incluído las imágenes y todo el rococó que tiene la parafernalia católica en sus lugares religiosos.- También tuvieron a su cargo, la pintura de grandes obras que se construyeron en la Plata en tiempo de Perón: El Automovil Club Argentino.- El Hipódromo de la Plata, y algunas más de gran envergadura.
Cuando la Argentina se vé sorprendida por la Revolución Fusiladora, que derroca a Perón, mi padre estaba llevando adelante una gran obra en Neuquén, que consistía en la pintura, con baste detalles de lujo, del nuevo cuartel o como se llame, cabeza militar de esa zona.-
Cae Perón. Mi padre, al año termina la obra, en la cual había invertido casi todos sus ahorros, de manera de hacerla y retirarse (tenía ya unos cuantos años para esa época, y trabajaba desde niño). Ahí tuve mi primera presentación de los militares argentinos, en vivo y en directo, más allá de los libritos del primario, y algunas historias del secundario. A MI PADRE, NO LE RECONOCEN NADA DE LO REALIZADO. LO AMENAZAN CON SU VIDA SI RECLAMA ALGO ANTE LA JUSTICIA. Y NO LO RECIBIERON NUNCA MÁS CUANDO POR DIVERSOS MEDIOS INTENTÓ COBRAR LO QUE HABÍA REALIZADO DE MANERA EXCELENTE.
Conocí a Los militares en vivo y en directo. Al Año de la REVOLUCIÓN FUSILADORA, en mi casa, una mañana se comienza a escuchar un tableteo ensordecedor de algo que yo no comenzaba a descifrar en primera instancia. Escuché a los grandes y decían que la aviación estaba bombardeando el Regimiento 7 de Infantería por que ahí se había generado una revuelta a favor de Perón. Parecía que estábamos en pleno bombardeo. Nuestra casa estaría a unas 10 o 12 cuadras del regimiento, y sobre los techos de las casas caían unas enormes balas de cobre que eran la consecuencia de haber ametrallado en picada al Regimiento.
Pasado este episodio, yo siempre quede con una aprehensión grande hacia ese regimiento. Supe que habían fusilado aun general que resistía en ese lugar, y sentí la indignación coincidente de mi madre y mi padre. Al poco tiempo, mi padre tiene un derrame cerebral, y queda hemiplégico. Yo tenía 15 años. Ahí tuve que comenzar a trabajar. Esto cursando 5to. año, y mi padre muere luego de dos ataques de "presión" o lo que fuere", que lo dejaron casi inmóvil. Yo ahí sentí que a mi padre lo había matado el ejército y el anti -peronismo. Creo que desde entonces nace en mí un odio visceral a todo lo que son las fuerzas armadas, y lo que significan como representantes de la muerte. Desde entonces la vida nos fué muy difícil a mi madre y a mí. Yo como adolescente sentí mucho la falta de contención de mi padre, y la falta de su protección. Desde entonces me acompañó una profunda orfandad que nunca en mi vida la pude superar del todo, no obstante la cantidad de tratamientos psicoanalíticos que tuve a lo largo de mi vida. Mi madre también salió a trabajar, y la vida se nos hizo muy dura, hostil y jodida. Por un tiempo perdí la alegría que me había acompañado en mi niñez y en los primeros años de mi adolescencia.
Creo que en 1958, en la guerra entre "azules y colorados" en que estaban envueltas las fuerzas Armadas, los colorados (de tendencia liberal), sitian a la planta de la destileria que YPF, (cosa que ya había hecho Rojas y la aviación, en el derrocamiento de Perón, y amenazó por entonces con hacerla volar si Perón no se rendía. Creo que fué una de las razones más profundas por las cuales Perón no se arriesgó a la lucha).- Sigo, los colorados sitian YPF, en manos de los azules (digamos el sector mas nazionalista (del cual saldrá Onganía) y en un acto de barbarie, cobardía y genocida, bombardean la destilería y matan a dos soldados "azules". Este acontecimiento volvió a marcar nuevamente mi vida:
Uno de los soldados muertos era el hermano de una gran amiga mía, que nada tenía que ver con la política, y que este asesinato destruyó sin retorno a toda la familia, incluída a esta amiga mía, que siguió de psicóloga y atendía en mi consultorio (ese que vos amiga conociste en la calle 15.-) Un cáncer al cerebro la destruyó mas temprano que tarde, dejando en la orfandad a su único hijo (íntimo amigo de mi hija Marina, de su misma edad), que lamentablemente carecía de padre, por que éste se separó de mi amiga, y nunca se hizo cargo de su hijo.-
Dejo a tu pensamiento e imaginación librada lo que pudo por entonces crecer en mi imaginario, en mi subjetividad, y en la construcción de mis pensamientos.- Por entonces tendría 18 años.-
Al mismo tiempo que sucede éste asesinato, yo estaba de novio con una chica que vivía en "los altos de San Isidro", muy paqueta ella, bonita, deportista, cuyo padre era general del ejercito Argentino, y vaya casualidad, tenía a un primo mío como secretario personal -este primo era hijo de una hermana de mi madre, y llegó a ser Coronel, e importante pieza del ejército en la Provincia de Buenos Aires. Sigo con mi noviazgo.- Yo estaba enamorado de esta chica, y creo que ella también estaba enamorada de mí. Ambos éramos jóvenes, apuestos, con recursos personales diferentes, yo más bien con recursos intelectuales y una gran cultura, y ella con gran capacidad para la acción. El padre, el General éste, fué nombrado, luego del bombardeo a YPF., como INTERVENTOR DE YPF. Con lo cual al breve tiempo, se me hizo un CLIK verdaderamente escalofriante. Fruto de ese escalofrío innominado fué esta poesía que escribí en ese tiempo:
TIERRA MILITAR
Tierra militar, de militares todos
con afanes de apedrear al militar caído,
con sus deseos de escupir con su voz de pus
al pus herido.
Tierra militar, con víctimas civiles
que caen para inmolar al general arriado
del mástil abanderado con sus intrigas,
silencios, y cobardes histerismos.
Tierra militar, yegua machorra
que muerdes y relinchas, y tienes sed confusa
con tu saliva inmunda; yegua hambrienta,
con hambre y delirio de espigas indias,
de ganado muerto.
Tierra militar que te despiertas
en hora y media, y medias horas,
entre besos, despedidas, y dieciséis cañonazos,
y "salve quien viene" y un solado muerto
que comulga en el altar de mi patria manoseada
por dieciséis nuevos cañones que saludan a
a un nuevo, a un otro, "salve quien viene".
Tierra militar, cascotes desgranados
por una tropilla guacha pisoteando
la bandera celestial que recubre el campo
descubierto de una juventud desamparada.
Tierra militar, eterno ahorcado
entre olores de pólvoras que no serán eternos,
destino escremental, fiebre uterina
de cien generales, mil comandantes
y escopetas miles.
Este texto forma parte de un pequeño libro de poemas que publiqué en plena adolescencias gracias a la ayuda de mi madre, que me pagó como pudo su publicación.
Ni bien publicado, le regalé un ejemplar a mi novia y a su padre.El final es el imaginable. NUNCA MÁS ME VIÓ. Y NUNCA MÁS LA VI.-
Esto, querida amiga, es lo que se llama "sentimiento peronista", y que constituye un gran relato del pueblo peronista, su gesta, sus derrotas, su grandeza, sus luchas, sus logros, sus mandatos, y todo aquello que NUNCA UNA PERSONA A QUIEN NO LE HA LLEGADO UN RELATO SEMEJANTE Y UNAS VIVENCIAS PARECIDAS, PUEDE LLEGAR A HACERLA EMPATÍA NECESARIA PARA COMPRENDER "EL PERONISMO".-
ESTOS RELATOS, ESTAS VIVENCIAS HILVANADAS CUANDO PEQUEÑOS, ESTOS RECUERDOS, NOS HABITAN DESDE NIÑOS Y CONSTITUYEN UNA TRAMA INCONCIENTE DE NUESTRAS SUBJETIVIDADES QUE PERMITE QUE CUANDO DOS PERONISTAS NOS ENCONTRAMOS, SIN CONOCERNOS, Y COMENZAMOS A HABLAR, PARECIERA QUE HUBIÉRAMOS COMPARTIDO LA INFANCIA JUNTOS.
ESTE ES EL RELATO, EL GRAN RELATO, QUE CUALQUIER PUEBLO DEL MUNDO TIENE CONSTRUÍDO EN SU IMAGINARIO INCONCIENTE, Y NOS HERMANA FÁCILMENTE A AQUELLOS SERES HUMANOS, QUE AÚN CON CULTURAS MUY DIFERENTES, TAMBIÉN FÁCILMENTE PODEMOS PONERNOS EN LA PIEL DEL OTRO.
Estos relatos vividos, articulados como hermosas fibras de hilos de seda, y habitando nuestras subjetividades, son los que nos permiten resistir y entender con cierta prontitud, por donde está caminando en imperio es cualquier momento.
Y estos relatos, que contienen amor colectivo y singular, también nos proveen para defendernos de todos los relatos que se tejen desde el imperio y por las más diversas vías llegan a nosotros para envolvernos e inutilizarnos.
Estas vivencias, este relato, nos predisponen a comprender y a ponernos fácilmente en la piel y en los sentimientos de los oprimidos de todo el mundo y de las más variadas épocas: es fácil comprender a los revolucionarios españoles: anarcos, y comunistas, en su gesta por la República. Es fácil ponernos en la piél de la resistencia italiana que se fué a vivir a los montes, y desde ahí jaqueaba al Fascismo. Es fácil comprender a la resistencia alemana, desde Rosa de Luxemburgo hasta Anna Arent, y todos los demás. Es fácil comprender a los sandinistas, a los combatientes salvadoreños, a los cubanos, a los tupamaros, a Allende, y hoy, a los palestinos, a los iraquíes, a los iraníes, y podría seguir con la lista, varias hojas más.
Con todo el afecto y respeto, amiga mía, me tomé tiempo en contestarte, por que necesito hacerte comprender en qué consiste "esto que se llama peronismo", y que resulta tan difícil entender, a los que cuando niños y aún jóvenes, padecieron la imposición del otro gran relato: el anti-peronista.-
Pedro
Querido Amigo:
Pedro, me interesó y me dio gusto leer tu explicación acerca de que es el peronismo. Esa definición de relato que se construye desde la subjetividad. Esas vivencias, pensamientos, sensaciones, percepciones, sentimientos. Esas historias inexplicables que no nos preocupamos por comprender pero que nos mueven interiormente y nos llaman la atención, y así las llevamos muchos de nosotros a la actuación/acción en algún momento de nuestras vidas y de una u otra manera seguimos en el movimiento contínuo que es el compromiso con los pobres, los que sufren, los marginados, los que amaba Evita. El peronismo y nuestras vidas son historia construída al mismo tiempo, lo mismo que el antiperonismo de muchísimos otros, casi como en espejo. Tu explicación corrobora lo que decía el General: el peronismo se aprende en la casa, es la familia quien lo transmite. Yo digo que se lo aprende a medida que los niños van creciendo. Quienes dicen que el peronismo es un sentimiento a mi juicio están diciendo lo que vos le narraste a a tu Amiga. Quizá por eso Leonardo Favio tituló su película "Sinfonía de un sentimiento".
Hermoso tu relato.
Un abrazo
Mabel